Hola yoguis y yoguinis!
Para que una postura se considere invertida, tu corazón debe estar más alto que tu cabeza. Generalmente cuesta mucho atreverse con las posturas invertidas, hemos nacido con un miedo innato a caer. El miedo tiene una función importante, y es que te alerta de una potencial situación peligrosa, eso está genial, el problema viene cuando el miedo se vuelve irracional y te lleva a la inacción. Las inversiones desafían el miedo a caer, aprender a lidiar con el miedo puede crear un fuerte sentido de la confianza. La confianza que obtendrás con las posturas invertidas te puede ayudar también con otros miedos y con otras situaciones.
Otra punto importante, es que las posturas invertidas ponen a tu subconsciente boca abajo, hace que cambies de perspectiva, que mires el mundo desde otro lado, y te dan un impulso de fuerza y confianza que luego vas a llevar sin darte cuenta a tu vida cotidiana.
Beneficios:
Gracias a la posición invertida del cuerpo, la circulación sanguínea se ve favorecida, retornando la sangre venosa al corazón sin dificultad. Esto resulta muy beneficioso para aquellas personas que tienen varices o hemorroides.
Es también debido a la posición invertida que los órganos abdominales se descongestionan y se liberan de la presión ejercida por la fuerza de la gravedad. Gracias a ello encuentran alivio estreñimiento, trastornos de la próstata, desplazamientos uterinos, gastritis, entre otros.
El cerebro es irrigado por una gran cantidad de sangre, de forma que se eliminan los espasmos vasculares ayudando a calmar dolores de cabeza. Además, este tipo de asanas sedan el sistema nervioso, ayudando a quienes padecen irritabilidad, hipertensión e insomnio.
Mejoran la respiración abdominal o diafragmática, ayudan a mitigar el asma y la bronquitis, y alivian los resfriados y otros trastornos nasales.
Provocan una mayor irrigación de sangre a las glándulas tiroides y paratiroides, manteniéndolas sanas y en buen funcionamiento.
Fortalecen los músculos de la espalda y abdomen.
Dan amplitud y movilidad a la cintura escapular.
Al colocar la columna vertebral en posición invertida, las vértebras lumbares son liberadas del peso y la presión a la que son sometidas habitualmente, siendo estas posturas muy eficaz para aliviar dolores en esta zona.
Regulan el funcionamiento de las glándulas hipófisis e hipotálamo, situadas en el interior del cráneo y encargadas de regular todo el sistema endocrino.
Estimulan las funciones intelectuales, mejoran la memoria y la concentración.
Contraindicaciones:
En caso de hipertensión, las posiciones invertidas se deben mantener por un breve tiempo y siempre consultando previamente con un médico. Además, los practicantes con afecciones cerebrales, sinusitis, otitis, glaucoma, hernia de hiato, o lesiones en vértebras cervicales deben abstenerse de practicar algunas posiciones invertidas.
Importante: si nunca has practicado busca ayuda de algún profesor@ antes de intentarlo, sobre todo, para las asanas más avanzadas.
Ejemplos de asanas invertidas:
1.- SIRSASANA - POSTURA SOBRE LA CABEZA
2.- SARVANGASANA - LA VELA.
3.- HALASANA - EL HARADO
4.- ADHO MUKHA SVANASANA - EL PERRO BOCA ABAJO.
5.- ADHO MUKHA VRKSASANA - EL PINO
6.- BAKASANA - EL CUERVO.
Que disfrutes de tu práctica y del proceso!
Namasté,
Marta.